Crítica


Juan Antonio Flores Lara :

EXPRESIVIDAD E IMAGINACIÓN EN SU OBRA PLÁSTICA

¿Se nace con una vocación para ser o hacer algo en la vida?
O, ¿eso es algo que se cultiva con los años y, en algún momento, cobra forma concreta?;

o, ¿se hace imposible de realizar por causas ajenas a la voluntad?
¿Existe algún impulso inconsciente que se lleva por un camino? O ¿todo sucede porque uno se lo propone?

Muchas preguntas como éstas pueden hacerse alrededor de las actividades humanas, pero lo importante no es saber cuál es su causa u origen sino cómo es el producto de esas actividades. Aplicar este punto de vista a las actividades creativas posibilita la comprensión de las llamadas manifestaciones artísticas, y por tanto, su apreciación.

Acercarse de esta manera a la pintura de Juan Antonio Flores Lara, da la libertad necesaria para disfrutar de ella y encontrar el sentido que muchos de sus temas tienen, planteados por el pintor de forma sencilla, en la mayoría de los casos.

Por otro lado, también permite la aproximación a sus obras por sus cualidades, entre las que destacan su uso desenfadado y jocoso de una amplísima gama cromática y una composición despreocupada y espontánea, que habla de su regocijo en la pintura.

Si Flores Lara nació con vocación por la pintura, o la cultivó, es algo que no sé. Pero, lo que sí se es que en ella ha encontrado el mejor medio para expresar su pensamiento y su sentimiento.

 

ANTONIO LUQUE
Crítico de Arte



 

La enseñanza del pajarito

COLORES ANIMADOS EN OBRAS RECIENTES DE JUAN ANTONIO FLORES LARA

 

Pintor por vocación, Juan Antonio Flores Lara, ha sabido acuñar un lenguaje visual expresivo, fino y sabio a la vez, debido a su inspiración que nunca cede y por propia manera de concebir la pintura.

Su dibujo siempre es acertado en tanto que su color reúne fuerza y sutileza, mientras que su talento para organizar arquitectónicamente sus pinturas es el de un artífice comparable a los mejores por su densidad y equilibrio.

La candorosa tranquilidad de sus conceptos igual que su sentimiento poético y humano de las cosas, no son muy comunes entre los artistas de hoy en día que se han olvidado de la simplicidad emocionante de lo auténtico y de los intrínsecos esplendores de la plástica que si componen la obra de Flores Lara.

Dentro de su lenguaje visual este artista destaca por atribuir importancia al objeto en si mismo, aun a las cosas más simples y sencillas, según podemos ver en pinturas como Recuerdo, Rezumbando el ritmo, El poeta, Ya te conocía, La enseñanza del pajarito y otras obras que se encantan por la brillante materia de su colorido y la magia de su contenido.

Igualmente sobresale en el arte de Flores Lara su cualidad para reunir gran cantidad de detalles ocultos y minuciosos para integrar con ellos composiciones significativas, alegres y sorpresivas como lo comunica al espectador Blanco diván, El rufián, Jugando con la fantasía, Lucero, Rino y otras pinturas.

Es posible decir que la manera de pintar de Flores Lara reconstruye hoy en día no solo la forma y el color sino, avanzando un poco más, incluso la manera de ser, según ocurre en obras como: ¿Y tú no sabias bailar?, Juntos contra el mundo, Circulo armónico, Amanecer, Ola fantástica, y varias más, que revelan que, mientras trabaja, este pintor descubre cosas que lo maravillan y le causan gran placer.

En resumen, Flores Lara ama la representación de paisajes, cosas y gentes, en todos sus detalles y animados colores, sin preocuparse de las transformaciones y deformaciones causadas por la luz y sus reflejos, o por el movimiento y el ritmo y otros factores, ya que lo mueve esa profunda comprensión que tiene de la vida, mezcla de sensibilidad y experiencia que nada tiene que ver con modas pasajeras ni con tendencias efímeras y virtuales, que aniquilan el entusiasmo por el arte, tan frecuentes hoy en día.

 

BERTA TARACENA
Historiadora y Crítica de Arte



 

Al ver la pintura de Juan Antonio Flores Lara notamos que posee dos aspectos distintivos: por un lado, el uso del color sin restricciones; y, por el otro, la libertad expresiva, que se refleja claramente en una temática que maneja sin convencionalismos técnicos ni compositivos.

Esto nos habla de una personalidad creativa entregada al deleite puro de pintar, con la única finalidad de dar rienda suelta a su imaginación. Sin embargo, detrás de esa aparente despreocupación subyace un firme propósito de superar las distintas etapas por las que ha pasado desde que se inició en esta disciplina de las artes plásticas.

Quién conozca su trayectoria, habrá percibido las diferencias que hay entre cada una de estas etapas, de las cuales la más marcada es la simplificación formal a la que ha llegado en la última de ellas, como resultado de un proceso reflexivo, al paralelo al desarrollo de un estilo sui géneris. Como todo creador Flores Lara tienen muchas influencias, pero no importa saber cuáles son ni de dónde las ha tomado, lo que sí importa es que las ha aprovechado para seguir su propio camino.

 

ANTONIO LUQUE
Crítico de Arte
México, DF  /  2011



 

Juan Antonio Flores Lara :

EXPRESIVIDAD E IMAGINACIÓN EN SU OBRA PLÁSTICA

 

El maestro Juan Antonio Flores Lara, ha seleccionado de su producción plástica actual varias obras que integran la exposición que presenta, se observan a todas luces los deseos del artista por denotar en las piezas elegidas la frescura, expresividad e imaginación de los temas.

Estamos ante un creador talentoso que tiene un lenguaje peculiar. Sus trabajos en esta etapa encuentran nuevos horizontes que abren espacios y caminos en su inquietante búsqueda; es el mundo en que se siente compensando por los resultados obtenidos de su obra, sobre todo, lo más recientes, donde muestran de manera sugerida, imágenes que relaciona con lo erótico, plasmadas con fina sensibilidad y cuidadosa interpretación; lo mágico de la fantasía y la idealización de lo real se funde en una estética de lo bello con brillo de luz y poesía.

El maestro Flores Lara juega con el color bañando su paleta con manchas que vibran de ricos matices, los esparce y frota con ímpetu sobre la tela. Durante este proceso va depurando y desapareciendo lo dibujado, trazando planos que esquematiza, simplificando los elementos que estaban, para transformarlos en una esencia de formas.

Con su gesto creador no busca la imitación, sino la autodefinición. En consecuencia, no es posible encasillarlo con exactitud en una escuela determinada. No descarto en su obra influencia en lo aprendido y que algo se le quedase del arte moderno. Creo que toda creación se debe trabajar con una forma abierta, así lo experimenta el maestro Juan Antonio Flores Lara en la libre expresión de su arte.

 

MARIO GALLARDO
Pintor y Crítico de Arte. Miembro del Consejo Directivo del Salón de la Plástica Mexicana
México, DF  /  Abril, 2008